La electrificación rural aislada, acceso universal a la energía.

Esta publicación es el resumen del seminario sobre «el acceso universal a la energía», que tuvo lugar entre 8 y el 10 de junio de 2016 en el Centro de Formación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia).

Tanto en el seminario como en esta publicación ha participado el itdUPM como miembro de la Mesa de Acceso Universal a la Energía.

El seminario se diseñó como instrumento para que tuviera lugar un encuentro entre las administraciones implicadas (ministerios y reguladores energéticos) y los agentes que están actuando en la electrificación de las zonas aisladas, como son las ONG´s, las Universidades y las empresas (éstas últimas movidas por su interés con respecto a la RSC), con el fin de que interaccionasen y compartiesen sus experiencias en este ámbito.

El seminario tuvo como objetivo la búsqueda de soluciones a los problemas y retos que suponen el acceso universal a la electricidad de las comunidades rurales aisladas, con especial énfasis en las condiciones para la sostenibilidad del servicio.

En el seminario se mostraron por una parte, las experiencias prácticas que pudieron compartir los agentes, en las que se identificaron las barreras y las buenas prácticas deseables, y por otra, las experiencias regulatorias de los reguladores sobre la electrificación rural y en especial en la electrificación de las zonas aisladas, donde existen escasas regulaciones nacionales por el momento.

energia

El próximo 29 de mayo organizamos en Madrid la presentación Alianza Shire, la primera alianza público-privada en la Acción Humanitaria creada en España, y cuyo objetivo es la provisión de acceso a energía a poblaciones refugiadas y desplazadas.

Durante la jornada, en la que participarán representantes de todas las entidades que forman parte de la Alianza Shire así como expertos internacionales en alianzas y acción humanitaria, se presentarán los resultados del proyecto piloto que hemos llevado a cabo en los campos de refugiados de Shire (Norte de Etiopía).

Regístrate ahora en la jornada de presentación de Alianza Shire

Fecha: 29  de mayo, 2017
Lugar:
 Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Av. de los Reyes Católicos, 4, Madrid

 

alianza shire

Manuel Pastor, exalumno del Máster en Estrategias y Tecnologías para el Desarrollo, se encuentra en los campos de refugiados del norte de Etiopía. Coordina los trabajos de la Alianza Shire en la que participa el itdUPM y trabaja de cerca la electricidad de los campos de refugiados.

En la carretera que une Shire, pueblo que da nombre a los campos de refugiados con Mai Tsabri, no es extraño ver a mujeres y niños subiendo cuestas interminables con cantidades de leña a sus espaldas dignas de auténticos portentos físicos.

Unas cuatro horas de electricidad al día no resultan ni de lejos suficientes para abastecer de energía los pocos servicios comunales que se encuentran conectados a la red eléctrica.

Los constantes cortes del suministro convierten a los generadores diésel en la auténtica fuente de energía eléctrica dentro del campo.

Conviviendo con la red, se puede observar una maraña de cables que conectan generadores particulares con los pequeños negocios que regentan algunos refugiados.

Basta con visitar la escuela primaria para entender hasta qué punto es necesaria una intervención que conecte al centro a la red. En esta escuela estudian unos 2.000 niños y niñas.

Apenas un par de bombillas alumbran el centro educativo. Necesitan, además, una gran cantidad de leña para preparar la comida de los 2.000 alumnos, por lo que lo dejan libre para las emisiones de gases y la deforestación de la zona.

Por otra parte, los trabajadores humanitarios abandonan el campo al caer la noche (a las 18:00), por lo que deja de ser seguro.

Unas pocas lámparas solares, de las que se encienden una ínfima parte, a duras penas dejan ver con nitidez unos metros de la calle principal.

En el resto del campo reina la oscuridad, haciendo imposible desarrollar otras actividades, y convirtiendo el simple hecho de ir a una letrina en algo temerario.

En las inmediaciones del campo de Adi-Harush, donde se da refugio a unos 8.000 eritreos, no queda lugar a la duda: la electricidad es un lujo.